¡OjO, Al hacer click abrirás el Armario de los Monstruos Humanos!


0
Quiero Lentejas!!!! odio a cronos, el keynesianismo y al fordismo aplicado para renombrar otra forma de esclavitud, el puñetero american way y el modelo smithiano. Conformarse con una grasienta hamburguesa que sature tus arterias mientras temes quedarte en la calle y las pequeñas explosiones de las burbujas de Coca-Cola te hacen cosquillas en la nariz. Que tu día a día sea lo mismo, la monotonía mitigue tus sueños mientras pocos se enriquecen mucho y la mayoría ponga el culo, la odiosa frase "pues haber estudiado" porque aunque lo hayas hecho o te hayas especializado en algo te espera la misma patraña. Cumplir objetivos absurdos mientras los realmente importantes se quedan en un cajón. El que tenga que entenderlo lo hará el que no lo haga que se conforme con pensar que soy una vaga y una hippy aunque pase mucho de la música pop. Ale... a mamarla, porque aunque tengas la desgracia de entenderlo no vas a poder hacer nada por evitarlo, así es la vida, mejor dicho: "el sistema" no nos engañemos, la vida ya sabe como putearte de otras muchas formas sobre todo cuando los que te rodean se han deshumanizado y perdido la imaginación. Culminaré el estado con otra frase odiosa de la lista top 10 "Es lo que hay". Por cierto os daría los buenos días en plan irónico después de haceos participes de la realidad tal y como la veo, pero como no puedo dar soluciones porque desgraciadamente formo parte de lo mismo, aunque despierte en medio de arrebatos de lucidez y realmente no sé que diferencia el hoy del ayer y el mañana es completamente incierto, pues lo único que os deseo es que no perdáis la sonrisa y que aprovechéis el poco tiempo que tenéis para vosotros en lo que os haga sentir mejor porque el dinero va y viene, pero el tiempo, ese no regresa nunca, realmente es la sustancia de la que estamos hechos. En realidad todo se compone del residuo del minutero, el tic tac, aunque los humanos tengamos una percepción absurda sobre el mismo. [+/-] Ver todo... ▼
0
PARANOIA PICTÓRICA Y CONVERSACIONES FRUSTRADAS: SINESTESIA SIN ANESTESIA----------------------------------------------------- Asimilar las vivencias que conoces a la perfección, después de una convivencia obligatoria con sensaciones desagradables durante años e intentar razonar con la parte más primitiva de tu cerebro, hasta llegar a una especie de acuerdo no parece fácil. Cuando la tregua se rompe puntualmente al cabo de un tiempo, se vuelve algo todavía más complejo. Es como cuando montas en bicicleta después de muchos años sin hacerlo, conoces el mecanismo, como funcionan los pedales, comprendes la física del movimiento pero te faltan reflejos. Siempre pensé que me había convertido en algo como un jarrón precioso hecho añicos, que un coleccionista había vuelto a pegar con mucho cuidado y aunque los bordes de las juntas de los pedazos rotos apenas se percibieran, al final el resultado es un jarrón roto y mucho más frágil. Hubiera sido más sensato que el coleccionista comprara uno nuevo, metafóricamente claro, la realidad es distinta y no te permite tirarte a la basura por la buenas. Vivir con un sentimiento con el que nunca deseaste compartir tu día a día se convierte en pura sinestesia, tu razón dicta una cosa mientras tu córtex orbitofrontal y tu sistema límbico procesa otra muy distinta, es como oler un color o ver un sonido. Yo llevo una larga temporada recuperándome de algo, así veo detalles que proceso de dos maneras distintas una desde la razón y la lógica y otra desde el miedo, la desesperanza y la ayuda de algún que otro pasajero fantasma que se ha acurrucado en un lugar en mi memoria y con ciertos estímulos puede desperezarse y aplastar con su garra el corazón de cualquiera. Forma parte de la locura de razonar lo que no tiene sentido. Me gustaría volver a ser ese jarrón antes de romperse. Cómo una persona valiente puede convertirse en el cobarde más absoluto, alguien seguro de sí mismo en un celoso sin remedio, un individuo con principios en un canalla...? nunca imaginé que lo que crees y defiendes en un momento de tu vida pudiera volverse en tu contra con tanta saña. Ojo! que no hay que olvidarse del coleccionista, siempre con ganas de recoger los pedazos y volverlos a juntar y unir esperando a encontrar la situación en la que el jarrón no se vuelva a romper, después de tantas aventuras y desventuras que sólo pueden superarse cuando ese coleccionista eleva a ese jarrón como una de esas cosas en su existencia que son realmente importantes e indispensables. Es imposible que nadie en calidad de mortal dentro de una historia épica u odisea como quieran llamarlo esté siempre a punto para prever cuando se va a romper el jarrón o cuando se ha roto,
dejar lo que está haciendo para ir a montarlo, lo que importa es que encuentra y busca el momento para arreglarlo. No nos engañemos, los héroes no existen y si lo hicieron pasaron a la historia.
[+/-] Ver todo... ▼
0
EL TRAJE INVISIBLE
Te levantas por la mañana y descubres un nuevo traje colgado en el armario, es transparente y al principio pesa un poco, incluso diría que es algo incómodo. Cuando te lo pones dejas de sentir tanto como lo hacías antes, ya no te molestan las carencias o exceso de sentimientos que antes guiaban los pensamientos recurrentes y dejas de prestar atención a detalles o a la ausencia de los mismos, todo parece más fácil cuando te das cuenta que el único enemigo que tiene poder absoluto para hacerte daño eres tú mismo y que ese traje neutraliza a los que intentaran causarte consciente o inconscientemente dolor, anulas su poder. Entonces el traje deja de pesar y se convierte en una fina capa de seda que va cubriendo tu piel casi hasta que parece formar parte de tu cuerpo desde siempre. Te sientes poderoso con la libertad de poder elegir ser o no tú mismo, te conviertes en maestro del arte del funambulismo, haciendo mortales sobre una cuerda a la altura de la exosfera donde quieres creer que las estrellas están mucho más cerca, casi que podrías estirar la mano y alcanzarlas, pasando por alto el vacío que hay debajo de tus pies, pero mantienes el equilibrio para no caer antes de tiempo. Decides bajo el borroso reflejo que te devuelven tus sentidos debajo de ese traje invisible dar sólo lo que recibes, dejar que la gente disfrute de tu candorosa esencia sólo cuando merece ver esa luz, esa luz que produce la chispa adecuada. Cuando ese traje arraiga en tu interior y te acostumbras a llevarlo dejas de ser algo necesario para el cosmos y convertirte en un asteroide más, te conviertes en un ser atractivo a la vez que peligroso para los demás, mantienes tus principios hasta el final porque eso es lo que permite que nunca te olvides con tu nueva piel de repuesto de quien eres en realidad. [+/-] Ver todo... ▼
0

Qué tipo de monstruo soy?

Como bien sabe todo el mundo no hay monstruo más horrible que el propio humano. Desde el primer contacto entre ellos siempre surgido a raíz de su característica más antigua el propio interés todo ha sido un cúmulo de despropósitos, la mayoría de las acciones buenas reconocidas no son más que acciones basadas en un propósito concreto: el recibir algo a cambio, dejando lo puramente material al lado, si quieren que me ponga espiritual diré por amor, comprensión o el simple hecho de ser escuchado, y ese pequeño acto dio paso a la hipocresía, falsedad, mentira, falacia, envidia, avaricia, necedad....
Hay grandes monstruos capaces de cosas que a los ojos de un ser sensible son imperdonables, monstruos cuya personalidad y características sólo pueden ser catalogadas dentro de una patología,
pero esos monstruos suelen tener grandes capacidades intelectuales, algunos nunca cometerán un delito en su vida, otros lo harán y la "injusticia" humana hará lo propio con ellos pero hay otros que conseguirán eludirla porque aunque sus impulsos les hagan cometer delitos su alta capacidad les permitirá cometer solamente delitos menores, manipular, embaucar e incluso parecer grandes personas, del tipo "pues jamás me lo habría imaginado, si el vecino era muy majo, siempre me saludaba cuando nos cruzábamos en el portal y me ayudaba con las bolsas de la compra para que no cargara peso"...
Me parto.
Luego hay otro tipo, el monstruo común y corriente, capaces de hacer daño con crueldad y falta de empatía, estos no disfrutan pero se camuflan en su traje de teflón utilizando la frialdad como escudo... estos últimos suelen hacer daño sobre todo a las personas que más los quieren, por querer camuflar su dolor, sentirse avergonzados, o saber que ese profundo amor siempre les dará la mano cuando la tempestad haya pasado. Les prometo que yo he intentado con todas mis fuerzas ser de estos últimos, querer defenderme atacando, intentar ser hiriente, pero no tengo madera de esta clase. Cuando me veo en la situación del dañado me siento tan sumamente mal que no soy capaz de recuperarme en días y mi ánimo se debilita, sintiéndome frustrada y basura.
Casi siempre que alguien es cruel conmigo la única reacción que mi mente acepta es la de huir lo más rápido posible al lugar más alejado que pueda de esa persona. Uso un caparazón, pero está bastante machacado por las experiencias y los años,ahora ya no me cubre mucho las espaldas. Considero que no puedo pertenecer a este tipo de monstruos porque mi sensibilidad y falta de inteligencia emocional no me permite dejar de querer a alguien de un día para otro, creo que puedo desquerer a alguien bajándole poco a poco del pedestal si las circunstancias lo requieren, pero jamás odiarle. Nunca odié a nadie durante mucho tiempo, porque tengo la capacidad y para mi es una virtud, de ver siempre las cosas buenas de los seres que interactúan conmigo,siempre elevándolas por encima de sus defectos. Hay monstruos normales y corrientes que querrían convertirse en monstruos patológicos para así poder justificar sus actos y no sentir remordimientos, con lo cual mi caso no es de los más graves.
Entonces es cuando me convierto en un monstruo inconsciente, hago que mi dolor, mi tristeza, mi inseguridad, mis miedos y dudas actúen sobre mi entorno machacándoles la existencia. En mi hay una inseguridad innata como la del resto de los monstruos,(excluyendo a algunos patológicos) y otra adquirida cuando paso

tiempo con algún ser inestable.
Al margen del tipo de monstruo que soy, sé en lo que no me quiero convertir. Cuando quiero puedo manifestarme como el ser más incondicional del mundo cuando considero que el beneficiario lo merece, sin dobles caras y compromiso máximo. Pero sólo el tiempo puede poner a cada uno en su sitio. No sé lo que haré, ni en que me habré convertido en el futuro. Sólo sé lo que querría hacer y convertirme. De momento vamos a disfrutar del momento presente, porque cuando sueñas con el futuro te duermes en el presente. Y lo bueno de los monstruos no patológicos es que solo muestran sus caras de vez en cuando, sobre todo cuando algo les altera su cotidianidad y tranquilidad, con lo cual somos completamente tolerables... y si no lo creen así busquen a otro ser mitológico por ahí y déjennos tranquilos. Que ahora se ha puesto de moda el querer ser distinto a la masa, y lo que no saben es que el ser distinto te complica el vivir contigo mismo.


Y RECUERDEN LOS MONSTRUOS ESTÁN POR TODAS PARTES, OCUPANDO ALTOS CARGOS POLÍTICOS Y ECONÓMICOS,
EN LAS ESCUELAS E INSTITUTOS, EN SU TRABAJO, INCLUSOOOOO HASTA EN SU PROPIA CASA, NO TENGA MIEDO TAMBIÉN PODRÍA SER FÁCILMENTE UNO DE ELLOS... MWAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
0

MONSTRUOS DE FIELTRO I

Tenía ganas de presentaros a esta panda de chalados de fieltro, cuando los encontré me contaron su historia y su nombre, pero hace tanto de aquello y como mi trastorno disfórico esta en pleno auge...
En estos días no me apetece hablar con ningún ser, ni siquiera de fieltro, tendréis que esperar a que se me pase y salga de mi aislamiento para que pueda preguntarles de nuevo y me recuerden aquel rollo sin pies ni cabeza que me soltaron en treinta lenguas diferentes cuando tropezaron conmigo... A esperar un rato... de momento quedaros con sus caras ;-)
[+/-] Ver todo... ▼
Back to Top